Día de cuenta atrás. Hoy falta un mes justo, según las cuentas del hospital, y nos hemos levantado con esa alegría, de que ya podemos empezar a contar en días hacia atrás. Mama ha pasado la tercera noche fatal, hoy no fue por tus movimientos, dice que te portastes súper bien, y que le has dejado estar hasta de lado, pero como sigue resfriada, y no puede tomar nada por el embarazo, se asfixia y le da tos, y no esta bien, y encima, se le metió un dolor intenso en la cabeza, y el dolor que tiene de espalda que no se le alivia, pero eso es del peso extra que lleva, así que durmió un rato en el salón, paseo, siguió paseando, y volvía a la cama, al nada otra vez a pasear, y otro rato al salón, y así ha estado toda la noche.
Hemos desayunado, y nos dimos una ducha, a ver si se le pasaba a mama el dolor de cabeza y espalda, y aunque no se le paso del todo, pero algo se le alivio. Habíamos quedado para comer con la abuela y la bisabuela, y le dije a mama de quedarnos en casa, pero ella me dijo que no, que la abuela había preparado la comida ya, y que no quería dejársela allí. Nos vestimos, y nos fuimos a comer con ellas. Hoy probastes por primera vez el cordero, a parece que te gusta, porque fue empezar a comer, y empezastes ha dar patadas, así que suponemos que es que el sabor te ha gustado, porque estaba buenísimo. Después de recoger la mesa, baje como siempre con la abuela hasta el segundo, he hizo los ejercicios en el pasillo. Estando en lo de la abuela, mama recibió un mensaje de la amiga abogada, Quina, y le ha dicho que sigue contando con ella para el trabajo, que esta pendiente de recibir unos papeles, y que cuando los tenga, que llamara a mama. Se ha puesto mama súper contenta, y la abuela mas, porque ha dicho que es una noticia genial, porque así, mama te llevara a su casa, para que te cuide mientras ella trabaja y yo duermo, y la verdad es que los ojos se le iluminaron, al pensar que te va ha tener en casa esos días. Y mama le ha dicho que por supuesto, que ella te traerá por la mañana y ya te recogerá al medio día, y todos mas felices que unas pascuas. Mama y yo estamos muy contentos con la noticia, no por el dinero, que también ayuda, y ahora mas, que legas tu y hay algo mas de gastos, pero no mucho mas, sino por que vuelva ha trabajar, y ha coger esa rutina del día a día. Mama no es una mujer de estar en casa, necesita trabajar, y estar haciendo cosas, y este trabajo no esta mal, porque en un principio son tres o cuatro hora, que se ampliara dependiendo del nivel de trabajo, pero siempre sera de mañana, que eso es lo importante, porque tiene toda la tarde para estar contigo.
Cuando la bisabuela se acostó, hemos ido un poquito a la Aldea ha ver a los abuelos y a tita Maruja. Hemos merendado con ellos, y hablado un ratito, pero no mucho, porque mama estaba cansada, y yo también, que aunque dormí un poco mas que mama, pero me desvelaba mucho para ver si ella estaba bien, y ya hoy empiezo el turno. Así que después de merendar, nos hemos venido a casa.
Guardamos un monton de tappers, que nos dio la abuela Pepi, y cosas que nos habia comprado en lo de Paco, y ya prepare el sofá para ver si podíamos dormir un rato. Abrí la parte de abajo, para hacer una cama grande, y traje la almohada y las mantitas, y nos hemos echado viendo la tele. Mama no ha podido dormir, no por nada, sino porque ella por la tarde le cuesta mucho, yo si di una buena cabezada. Mama se despertó para merendar, y ya me quede yo en un lado y ella en el otro, y he estado un buen rato dando cabezadas, hasta que ya a las nueve y media, nos levantamos para hacer la cena.
Hemos cenado una ensalada, con huevos rellenos, ensalada de patatas y habichuelas, y unas empanadillas. Ha sido algo de sobras de otros días, pero da pena tirar la comida, así que hoy decidimos acabar con esas sobras, y mañana ya empezar ha hacer cenas. Después de recoger, he empezado con nuestro momento, y cogí la cremita de mama, y empece con el masajito.
Hoy has estado algo mas tranquila, pero has hecho algo nuevo he increíble. Empecé con el masaje normal, y te movías un poco, sobre todo la rodilla izquierda, que la estirabas y se notaba el pie debajo del pecho derecho de mama, y la rodilla en la barriguita en la parte de arriba un poco a la derecha, pero al nada, empezastes hacer algo increíble. Te estaba hablando como cada noche y te estaba diciendo que mama me había dicho que anoche te portastes genial, y que me alegraba mucho escucharlo, porque como te pedí que la dejaras dormir, y la dejastes, es como si me escucharas, aunque se que es imposible, pero es algo muy bonito, y te dije que eres mi niña buena y guapa, y te di un beso en la barriguita, y al dar el beso, yo tenia la mano, donde tu tienes la rodilla, y distes un golpe, y me quede mirando a mama, y te di otro beso, y distes otro golpe, y mama y yo flipabamos, en plan, es casualidad, pero no, porque lo hice como diez veces mas, y cada beso que te daba, tu dabas una patada, y porque mama me dijo que parara, que ya le estaba doliendo, sino todavía estamos los dos así, yo dándote besos y tu patadas. Ha sido alucinante, no se como describirlo, el ver que has reaccionado a todos los besos que te he dado, no se, increíble. Ya, a las once y media, sonó el maldito despertador, y me tuve que despedir de las dos, para venirme al trabajo, hoy preocupado, de si mama podrá o no dormir y descansar, de si se le aliviara el dolor de espalda y cabeza, y sobre todo, de si estaréis las dos bien, y yo aquí sin enterarme de nada, que es lo que peor llevo. Pero bueno, mañana me enterare, a las ocho, que recojo a mama para ir a la ultima analítica. Hasta mañana mi Lucia, hasta mañana mi niña, te queremos muchísimo.
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