Dia de descanso para prepararnos. Sali de trabajar y me fui corriendo a casa, para intentar dormir lo maximo, cuando llegue, mama estaba despierta, porque dice que le has dado un poco esta noche, pero que al final, ha podido descansar aunque sea un rato. Me acoste y me llamo mama para comer.
A las cuatro, me llamo para comer, habia pollo al horno, y hemos almorzado viendo la tele un rato. Despues de comer, recogimos la mesa, y estuvimos en el sofa viendo sobrenatural, que ya por fin hemos terminado de ver esta temporada.
Tita Jessy, nos llamo para decirnos que hoy llegaban de Marruecos, sobre las ocho y media, que si nos ibamos a lo de la abuela para vernos, pero le hemos dicho que no, que yo quiero dormir esta tarde lo que pueda, porque mañana es la eco, y es a las diez, asi que no tengo ni idea de a la hora que me acostare, que ya nos veiamos estos dias mejor.
Sobre las seis, me he acostado un rato, y mama se ha puesto hacer los ejercicios de la pelota, porque hoy esta con un dolor muy fuerte en la espalda, y yo creo que esto va ha ser asi hasta que nazcas, porque ya sera del peso que soporta en la barriga.
A las nueve me llamo para cenar. Hemos hecho un revuelto de patatas, bacon, y verduras, que compramos en el mercadona, que esta muy bueno, y se hace en un momento, y hemos cenado viendo una peli, bueno, un trozo, porque ya nos pusimos ha recoger, y me di una ducha. Al salir, cogí la crema, y le he estado dando un masaje a mama en la espalda, de una media hora mas o menos, porque no me iba ha dar tiempo de darle el de la barriguita, y ese si que me gusta darlo.
Sobre las once, empece con el de la barriguita, y he estado hablándote todo el tiempo. Haces cosas increíbles, me encanta el hablarte y que me contestes con porracitos, o que yo apoye la cabeza en la barriguita de mama y tu me la empujes, porque esta claro que la barriguita es tuya, cualquiera se apoya. Hoy te conté el día, te conté que mañana vamos ha verte y que ya es la ultima vez hasta que nazcas, y que estamos nerviosillos, porque estamos muy ansiosos de verte. También te pedía, que no le dieras a mama patadas tan fuertes, que le duele, y la pobre, entre el dolor de espalda, el resfriado, la alergia y las patadas, lleva unos días echa polvo.
A las once y media, ya sonó el despertador, y me tuve que cambiar, y me he venido al trabajo, después de despedirme de las dos, y aquí estoy, a las dos, escribiéndote este día, muy nervioso por verte mañana. Así que intentare relajarme, porque me queda un rato hasta la eco. Hasta mañana mi niña.
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