Día de escucharte. Esta mañana nos
levantamos temprano, nos vestimos y nos fuimos a la matrona. Ha revidado todo
los informes de la eco y analítica, y ha dicho que está todo muy bien, y que
eres grande, que tus medidas son un poco más de lo normal. La abuela Pepi ha
venido con nosotros, y te hemos escuchado, porque la matrona pone un cacharro
para escuchar tu corazón y ya parece más normal, ya no late tan rápido como al
principio, que iba lanzado, ahora tiene las mismas pulsaciones que un bebé
normal. Nos ha gustado mucho, y a la abuela también, y has hecho una cosa
alucinante, cuando la matrona puso el cacharro, le distes una patada, y se
quedó migrando y flipando. Le ha dado cita a mama para los ejercicios de
preparación del parto, que en los primeros yo no puedo ir, pero a los otros si.
Al salir, fuimos a tomar café, y
hemos desayunado los tres en el bar de al lado del ambulatorio, y ya nos hemos
ido al mercadillo con la otra abuela. La hemos recogido y nos fuimos al
mercadillo.
Yo no se ya que te hemos comprado, ha
sido bestial, sábanas, patitas, gasas, rebeca, patuco, toalla, yo que se, de
todo. Nos hemos gastado entre la abuela y nosotros más de cien euros. Ya si que
hemos decidido de no comprar nada más, porque no creo que nos de tiempo a
ponerte todo, y es una pena que se quede ropa sin usar.
Después de dejar a la abuela en casa,
nos fuimos a casa de la abuela Pepi a comer con ella y la bisabuela. Hemos
comido filetes de ternera negros, que es como los llamamos, que son unos que
hace la abuela con una salsa negra, y nos encanta, y mama dice que tiene que
aprender hacerlos para ti, también. Había ensaladilla de hueva, que aunque a
mama no le gusta a nosotros nos encanta. Después de comer, hemos recogido todo,
y nos hemos quedado con la bisabuela mientras la abuela bajaba al medico, y la
he puesto ha andar y hemos bajado al primero. Cuando subió la abuela mirarnos
todo lo que se te había comprado y ya cuando se acostó, nos fuimos a Palmones a
mirarme unos polos para el trabajo.
Cuando llegamos, nos llamó tita, que
acaba de salir de trabajar, que si nos tomábamos un café, así que quedamos en
la dulce campesina y merendamos los tres. Después fuimos a Carrefour a comprar
unas cosillas y ya tita se fue al trabajo y nosotros nos vinimos a casa.
Hemos cenado viendo una peli, y nos
hemos acostado temprano, que mañana tiene mama la analítica y prueba del
azúcar, así que aquí estoy, en la cama, escribiendo este día tan movido, Envíe
que te hemos vuelto a escuchar. Hasta mañana mi Lucía.
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